Rubén Darío: 154 años de Inmortalidad y Grandeza

“Toda la armonía del mundo” nació en el verso de Félix Rubén García Sarmiento, el 18 de enero de 1867; Quizo ya el destino que fuera el trópico seco nicaragüense quien lo recibiera de los brazos de su madre Rosa Sarmiento en la ciudad que con honra lleva su nombre.

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Pero el carácter de su padre Félix García no fue suficiente para tener el privilegio de verlo crecer y fueron sus benefactores Félix Ramírez, esposo de su tía Bernarda Sarmiento, quiénes llevaron al pequeño a conocer el mundo fantasioso de los libros.

Es en León donde estudia sus primeros años y se da a conocer como niño prodigio, hasta llamar la atención de los jesuitas en Managua donde se muda para continuar educándose.

Realizó constantes viajes a El Salvador, Cuba, Guatemala, Costa Rica, Argentina, Chile, México, Nueva York, Panamá, Brasil y Uruguay, pero la mayor parte de su vida adulta la vivió entre París y España.

Para entonces ya era un reconocido periodista colaborador de importantes diarios, un diplomático representando al estado de Nicaragua y el maestro más perdurable que la poesía en lengua castellana haya conocido hasta estos días.

Su primera esposa fue Rafaela Contreras quien le inspiró versos dulces, su segunda esposa fue Rosario Murillo, pero también era pública la relación amorosa que sostenía con Francisca Sánchez, con quien procreó 4 hijos de los que ninguno logró sobrevivir.

Vuelve a esta tierra de lagos y volcanes en su lecho de muerte. Se asienta entre Managua y León en donde finalmente el 6 de Febrero de 1916, le encuentra la muerte, pero no en soledad.

El Príncipe de las Letras Castellanas fue sublime hasta en su sepelio, miles admiran y reconocen la hermosura de la obra del Pájaro Azul.

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