Joven rompe el silencio y dice que el mismo sacerdote que lo violó cuando era monaguillo, fue el que lo casó
Michael Rodríguez tiene 38 años y es uno de los dos hombres que han presentado una denuncia ante la Iglesia Católica de Costa Rica por supuestos abusos sexuales por parte del sacerdote Mauricio Víquez Lizano, quien actualmente no puede hacer actos religiosos y está bajo investigación por otra demanda.
Rodríguez durante su infancia y adolescencia fue monaguillo en la Iglesia de Tres Ríos y de Patarrá, en las que Mauricio Víquez Lizano era el sacerdote. Michael cuenta que los abusos fueron cuando él era menor de edad, y que nunca pudo encontrar el valor para contarle a su familia lo que había sucedido.
Michael recordó que los supuestos abusos y tocamientos que denuncian se daban dentro de los carros de la Parroquia de Patarrá o en la propia casa cural. Luego, cuando dejó de ser monaguillo, notaba como el sacerdote seguía el “mismo ciclo” y se encerraba con los niños; ya él imaginaba lo que iba a suceder.
El denunciante hace algunos años les informó a sus padres que iba a casarse, teniendo como respuesta una exigencia de que fuera el sacerdote Víquez quien lo casara, pues había sido como “un padre” para él y sus papás le tenían enorme afecto.
Michael Rodríguez la primera vez que contó lo que había vivido lo hizo en confesión, hace unos 6 años y nunca más mencionó el tema, pero hace apenas un año, encontró el valor que necesitaba y le contó a sus papás que había sido abusado por ese “hombre de fe” al que le tenían tanto cariño y respeto. Así mismo aprovechó ese momento para reclamarle a su agresor por única vez .
El pasado 15 de mayo del 2018, Michael presentó una denuncia canónica. Antes de eso acudió al Arzobispo, José Rafael Quirós, a quien le contó todo lo que vivió desde la fecha en que vivió los abusos hasta la actualidad. Asegura que de parte de Quirós solo recibió una disculpa y el ofrecimiento de ayuda psicológica y describe el proceso con la Iglesia Católica como “duro”.
